Me parece impresionante que aquí nos sigamos matando. Esto no es una cosa de este año ni del pasado, esto viene de los 70. Se volvió paisaje hasta el punto de que aquí a la gente no le importa”.

El periodista Santiago Mesa lleva 18 meses en la sala de redacción del periódico El Colombiano. Llegó a desempeñar labores cuando Medellín se convertía en la única de las cinco capitales más grandes del país donde la tasa de homicidios seguía aumentando. Una cifra que no deja de subir, como revelamos ayer en el  reportaje  con el que abrimos la conversación #HablemosDeMedellín.

Santiago debe cubrir dos homicidios cada día. En su lente han quedado capturadas muchas de las paradojas de su ciudad: la indolencia de la mayoría de ciudadanos, la conflictiva relación con la policía, y la contradictoria postura de la actual administración, que pareciera asumir que el alza en los homicidios es casi que un indicador positivo en su lucha contra las bandas.

“Me he dado cuenta de que esta ciudad es demasiado violenta”, nos dijo por mensajes de voz cuando nos envió las fotos. “En todos los niveles, no solo la de las pandillas: la intolerancia, el machismo, la desigualdad, el conservadurismo. Tenemos todos los males encerraditos en este valle”.

“También he aprendido que la gente es descorazonada. La gente volvió esto paisaje. Nadie habla de esta guerra que hay tan fuerte, tan sangrienta, simplemente porque son pillos”, asegura. “Ninguna muerte debería ser una buena muerte”.

Le pedimos a Santiago que seleccionara algunas de sus fotografías y que compartiera lo que ha aprendido sobre esta problemática cada vez que sale a campo.

Advertimos, de antemano, que se trata de fotos muy sensibles, y que publicamos por una sola razón. Como él mismo dice:

“Hay que seguir conversando de esto. No porque sea una verdad fuerte hay que bajarle decibeles. No se puede abandonar ese tema porque sigue pasando, va a seguir pasando y nadie está haciendo nada”.

Desde Mutante queremos darle las gracias a Santiago, a Esteban Vanegas, su editor, al diario El Colombiano, y a la fotógrafa Paula Thomas, por hacer esta selección posible.

A Santiago lo encuentran en redes sociales como @smsari y a su colectivo como @reojocolectivo.

#HablemosDeMedellín.

“Este es el pelado de Envigado que mataron los policías por no parar en un retén, del que habló el reportaje que publicó esta semana Mutante. Eso fue la cagada, porque era un jovencito que venía de estudiar.

Yo quedé muy afectado. Me parece increíble que en esta ciudad pase eso. Y además el policía lo cogió así a quemarropa por la espalda, cuando ya había parado. Lo único que se le ocurrió a ese tombo fue matarlo”.

“Él era un exparamilitar de las AUC. Lo venían persiguiendo en una moto y estaba por la Terminal del Norte, en una de las vías principales de la ciudad. Lo mataron ahí, le dispararon y cayó en la vía. Ese cordón estaba súper cerquita y no nos alejaron casi del cuerpo, ni a la prensa ni a la gente en la calle que generalmente se queda mirando.

Esta foto la hice desde un puente, desde el puente del Metro, que también atravesaba esa vía. Cuando veo esta foto pienso en los cuerpos de los jóvenes paisas, los jóvenes de la eterna primavera, que no alcanzan a florecer ni a llegar al verano. Esos verdes, ese rojo…

En este caso no hubo casi prensa. Estuvimos siempre una fotógrafa y yo que somos los que siempre estamos y fue rápido, no le hicieron mucha bulla en medios”.

“Ella era una pelada de Manrique, un barrio de Medellín de las periferias. Yo no cubrí el homicidio en caliente porque muchos, casi que la mayoría, son después de las 6 de la tarde: por la noche o por la madrugada. Imagínense cómo será eso de noche, si de día a mí en algunos momentos me han tocado casi que dos diarios.

Al otro día fuimos a la casa y nos sentamos a conversar con la mamá y nos encontramos con este altarcito que le hicieron. Yo creo que es una cuestión muy paisa, muy colombiana, de hacer siempre un altar a los que matan o los que se mueren. La mamá dice que ella no estaba enredada pero que de pronto por ahí alguna amistad.

Es muy loco porque, si ven arriba en la foto, hay otra persona que también asesinaron. Creo que era el hermano de ella, es una cagada. La mamá estaba súper triste. Es una familia muy pobre”.

“Esta es muy fuerte: un peladito de 16 años que mataron supuestamente porque se equivocaron, se confundieron unos pillos de un combo. Después pidieron perdón en una carta en la que dijeron que se habían equivocado, nada más.

El pelado era hermanito de un futbolista paisa, que no juega aquí en la ciudad, por eso sonó. El alcalde trinó pero no pasó a mayores. Pero bueno, sí tuvo más atención que la mayoría por ser menor de edad, obviamente”.

“Este fue uno de los primeros homicidios de la ciudad que me tocó cubrir. Fue un venezolano. Creo que fue un caso de intolerancia en la (comuna) 13, como en un taller de mecánica, no sé bien qué era. El man estaba ahí y luego pasaron en una moto y lo mataron. Creo que fue por una deuda.

Fue muy impresionante porque ahí fue que me di cuenta de lo poco que le importa esto a la gente en la calle. ‘Ah, sí. Un muerto más, un muerto menos’. Pero la gente se parcha ahí a mirar y atraviesan la cinta, así no se puedan pasar porque es la escena del crimen.

Miren a la que: va con un Hello Kitty, salió de su casa. La cosa más extraña del mundo. La gente toma fotos. En fin, ahí fue que me empecé a pillar la vuelta”.

“Esta es levantamiento de alias ‘Turrón’, un duro de La Sierra. En ese momento era el más duro. Fue mero operativo, por allá en un monte arriba.

Eso se llenó de prensa. Era como a tres kilómetros de donde estaba el cordón, entonces no nos dejaban ver nada. Un helicóptero sobrevoló, aterrizó, había militares, policía, Esmad. Después llegó, obviamente, el alcalde.

El alcalde dejó entrar a los medios. Caminamos los tres kilómetros con él y con una corte de prensa la hijumeadre, y de gente del alcalde. Éramos muchos.

El muerto ahí, dos capturados, el alcalde pasó por el lado, que tenía que reconocer la escena. Eso a mí no me había tocado. Después subimos adonde está el campamento que habían hecho ellos. El alcalde dio rueda de prensa y después se despidió diciendo que gracias por estar ahí.

Yo no sé. Es Medallo… fue un show”.

“Esta escena es demasiado común en todos los homicidios. Siempre llega demasiada gente, sacan los celulares, los tombos tienen que regañar a la gente porque está tomando fotos. En esta ocasión, yo no creo esta señora se estuviera riendo, pero hizo un gesto que parecía como un chiste. Es como el reflejo de lo podrido que también está Medellín. No solo de que maten tanto, sino de lo normalizado que se ha vuelto. Yo creo que ejemplifica lo que siempre pasa en los homicidios”.

“Este un caso no tiene nada que ver con la guerra que hay entre pandillas. Es de una señora que por la mañana salía a trabajar y en la parada del bus, tipo 5:30 de la mañana, la cogió un tipo y la llevó a la quebrada. Allá parece que la violó y la mató. Toda su familia salió a buscarla por toda la ciudad porque en el trabajo no había llegado. A alguien se le ocurrió asomarse a esa quebrada y la encontraron. Fue un drama.

Llegamos a cubrirlo y estaba toda la familia súper adolorida. Fue muy complejo. Estuvimos ahí un ratico, logramos hablar un poco y nos fuimos porque de verdad fue súper fuerte estar ahí”.

“Yo no cubrí el asesinato de Andrés Legarda en caliente, no estaba. Pero me tocó ir unos días después a este show que le armó la alcaldía en la Macarena y como si fuera un concierto. Fueron artistas, cantaron, se llenó de fans de este cantante y youtuber. Fue sobre todo un show más que un acto de luto por un amigo que se murió.

Yo no recuerdo, o no me ha tocado en los dos años que he estado cubriendo este conflicto, que el alcalde haga o le ponga tanta atención a otra víctima de homicidio. De ninguno. Yo sé que el man habla cuando matan a duros o a pillos, pero siempre celebrando. No habla de casos especiales, a parte del de Legarda.

Fue mero show, en la foto se ve que es un gentío. Había mucha gente conmovida pero también mucha gente que estaba como, pues… ya saben, como son los youtubers, como si estuvieran en un programa”.